Wednesday, July 20, 2011

Mi visión personal acerca del Evangelismo

En una ocasión se le preguntó a Helen Keller: “¿Qué podría ser peor que nacer ciego?” Ella respondió: “Lo único peor a no tener vista es no tener visión.”1 Es verdaderamente trágico no tener rumbo ni dirección en la vida. Por eso con tanta sabiduría la Biblia dice: “Donde no hay visión, el pueblo se extravía.”2 En otro pasaje Dios dijo a Habacuc lo siguiente: “Escribe la visión, y haz que resalte claramente en las tablillas, para que pueda leerse de corrido.”3

Es por ello que para mí es tan importante tener claridad en la visión que Dios me ha dado para mi vida, familia y ministerio y escribirla. En cuanto al Evangelismo, mi visión es: “Ser un instrumento de Dios para ayudar a otros a tener un encuentro personal con Cristo y descubrir el propósito de Dios para sus vidas, llevándolos a una experiencia íntima con Dios a través de una adoración genuina y la enseñanza clara de la Palabra de Dios.”

Hoy día, algo muy especial está sucediendo alrededor nuestro. Dios se está moviendo de tal manera en todas partes del mundo que tenemos que abrir nuestros ojos. Es asombroso ver cómo nuestro Padre Celestial aún está obrando y nos está invitando para unirnos a Su obra. En medio de un mundo que está constantemente cambiando, tenemos que reconocer que es imposible continuar haciendo nuestro trabajo de la misma manera que la iglesia lo ha hecho por muchos años. Los métodos que se usaron tiempo atrás, el día de hoy se han convertido en obsoletos, por lo tanto debemos estar abiertos a nuevas formas para evangelizar.

Quiero ser bien honesto al decir que éste tema es particularmente incómodo para mí. La verdad es que aún cuando uno está metido tiempo completo en el ministerio, puede fácilmente olvidar la tarea básica de compartir de Cristo con aquellos que aún no lo conocen. Si bien es cierto que somos llamados a hacer discípulos y enseñarles que hagan lo que Jesús nos dijo, esto no nos exime de llevar a cabo personalmente la tarea compartir de Cristo con el perdido como un estilo de vida. En medio de las múltiples ocupaciones, uno podría justificar que no tiene tiempo para salir y evangelizar.

Sin embargo, yo pregunto: ¿Qué tarea hay más importante que esta? El Evangelismo no es una opción para el creyente, o la tarea de una élite de profesionales especializados. El Evangelismo es un mandato para todos los cristianos en todas partes del mundo. El escritor C.S. Lewis dio en el blanco cuando comentó: “La gloria de Dios, y, como nuestro único medio de glorificarlo, la salvación de las almas es el asunto real de la vida.”4 La manera en la que yo puedo darle la gloria a Dios es siendo obediente en el cumplimiento de la Gran Comisión que Él nos dejó, es decir, compartir con otros acerca de la persona de Jesús.5

La Biblia está llena de pasajes que demuestran que esta Gran Comisión siempre ha estado en el corazón de Dios, y por lo tanto mi ministerio futuro debe estar impregnado por una pasión por lo que a Él le apasiona. Es claro en las Escrituras que Dios está apasionado por las multitudes de personas que se encuentran como ovejas sin pastor. Él está apasionado por el perdido. Como dice el autor Dave Earley: “El corazón de Dios está y siempre ha estado latiendo por todas las personas de las naciones.”6 A pesar de que las personas no lo reconozcan, sin Cristo se encuentran perdidas, y fue precisamente a ellos a quienes Cristo vino a buscar. Es por eso que la manera en la que veo mi ministerio hacia el futuro es completamente enfocado en alcanzar a las personas que aún no conocen de Cristo.

Recordando el encuentro que tuvo con la mujer samaritana,7 Jesús tuvo que hacer a un lado todas las barreras culturales, religiosas y raciales de esa época para acercarse a esta mujer y escuchar lo que había en su corazón. Esto abrió las puertas para que ella alcanzara la salvación. Esta es la forma en la que quiero ver mi ministerio de ahora en adelante. Quiero ser alguien que se acerca a las personas, no es con palabrerías, ni argumentos, sino solo para escucharlas. Aunque esto vaya en contra de mi naturaleza, escuchar a las personas será la habilidad más importante que tendré que desarrollar en mi ministerio si quiero ser efectivo en alcanzar a las personas para Cristo. Esto me hará sensible a las necesidades de las personas, aprendiendo así del modelo que nuestro Señor Jesús nos dejó.

Mi anhelo es ver mi ministerio pasando tiempo con las personas con las que Jesús hubiera preferido estar. Él prefería estar con la gente en necesidad y tenía compasión de ellos ya que eran como ovejas sin pastor.8 Debido a esto Él se ganó la reputación de ser amigo de pecadores y de comer con ellos.8 Cuán agradecido estoy con mi Dios porque ahora puedo comprender que para alcanzar a las personas se requiere que yo ajuste mis métodos o formas, dado que cada persona es diferente y requiere diferentes acercamientos evangelísticos.10

Hasta ahora he encontrado que en ocasiones algunos de los métodos o formas que he usado en el pasado han estado opacados por el legalismo y la tradición. Hoy puedo comprender que las personas en esta era postmoderna no necesitan saber cuánta Biblia conozco de memoria. A ellos lo que les interesa es saber si soy real y transparente. Es por ello que quiero vivir el Evangelio de una manera Encarnada en la que mi manera de vivir refleje lo que creo. Quiero ser un libro abierto a donde quiera que vaya y que las personas pueden ver a Cristo en mi. Quiero ser verdaderamente para la gente la sal de la tierra y la luz del mundo.11

OLIVER MARTINEZ

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[1] Helen Keller Quotes. http://thinkexist.com/quotes/helen_keller/
[2] Proverbios 29:18. Santa Biblia. Nueva Versión Internacional, 1999.
[3] Habacuc 2:2. Santa Biblia. Nueva Versión Internacional, 1999.
[4] C.S. Lewis, Reflections (Grand Rapids, MI: Erdmans, 1967). Pg. 14.
[5] Mat. 22:34-40; Mat. 28:18:20. Santa Biblia. Nueva Versión Internacional, 1999.
[6] Dave Earley & David Wheeler, Evangelism is… How to Share Jesus with Passion and Confidence (Nashville: B&H Publishing Academic, 2010), Pg. 19.
[7] Juan 4. Santa Biblia. Nueva Versión Internacional. 1999.
[8] Marcos 6:34. Santa Biblia. Nueva Versión Internacional, 1999.
[9] Lucas 7:34, 19:10, Mat. 9:9-11. Santa Biblia. Nueva Versión Internacional, 1999.
[10] Dave Earley & David Wheeler, Evangelism is… How to Share Jesus with Passion and Confidence (Nashville: B&H Publishing Academic, 2010), p. 82.
[11] Mateo 5:13-16. Santa Biblia. Nueva Versión Internacional, 1999.